domingo, 19 de enero de 2014

Magdalenas de mantequilla.


¡Hola a todos! Pasadas las fiestas de Navidad, con todo el trabajo extra en la cocina y las recetas más pesadas, vamos a recuperar el ritmo de cada día con una receta dulce más ligera, perfecta para los desayunos del Domingo o el café de la tarde.


Me gustan las magdalenas con mantequilla más que con aceite, como se suelen hacer, y suelo utilizar nata o yogurt para enriquecer la mezcla, así que he querido idear esta receta con las cantidades mínimas de grasa y azúcar, para compensar un poco los excesos navideños y poder disfrutar de algo dulce durante la semana sin mayores remordimientos. En esta ocasión, vamos a trabajar más la masa que en otras recetas que os presento en este blog, porque el resultado es tan ligero y esponjoso que merece de verdad la pena. Las magdalenas de las fotografías llevaban buttermilk, que podéis encontrar en Lidl, por ejemplo (buttermilch). Si os gusta que las magdalenas absorban mucha leche al mojarlas, merece la pena esmerarse y batir muy bien las claras. ¿El punto fuerte de la receta? Que se puede hornear en seguida la masa una vez trabajada.




Ingredientes (para 12 piezas apróx.)


100 gr. de mantequilla.
125 gr. de buttermilk (se puede sustituir por leche o yogur).
125 gr. de azúcar.
3 huevos medianos (a temperatura ambiente si es posible).
130 gr. de harina de arroz.
70 gr. de almidón de maíz.
1 cucharadita de levadura en polvo o bicarbonato o polvos de hornear (no son imprescindibles).
1 pellizco de goma xantana (no es imprescindible, ayuda a que no se desmiguen).


Preparación


Mezclamos bien los secos. Fundimos la mantequilla y la mezclamos con la buttermilk, separamos las claras de las yemas de los huevos y reservamos las claras. Mezclamos las yemas con el azúcar, añadimos la mezcla de buttermilk y mantequilla y mezclamos bien con la varillas manuales. Ahora es el momento de añadir los secos a la mezcla, hasta que se integren bien, y dejar reposar a temperatura ambiente (10 minutos máximo). Aprovecha para precalentar el horno a 220º (con calor arriba y abajo y sin ventilador).

Batimos las claras que habíamos reservado, a punto de nieve fuerte, y las añadimos a la mezcla con cuidado, para evitar que se bajen en todo lo posible. Llenamos los moldes, bajamos la temperatura del horno a 180º y horneamos de 12 a 15 minutos (como siempre, el tiempo dependerá de vuestro horno).




Solo batir hasta que se intregue la harina


Despues de un reposo de 10 minutos la textura es muy diferente


Claras a punto de nieve


Sobre moldes


El secreto para hacer unas buenas magdalenas es contar con el molde adecuado. Si esta receta os gusta y os apetece hacerla a menudo os merecerá la pena invertir en una bandeja para magdalenas metálica de 12 unidades. Encontraréis también en el mercado moldes individuales de aluminio de usar y tirar (que, en realidad, son reutilizables), pero, para uso frecuente como ocurre en mi casa, sale mucho más económico comprar la bandeja. Para alargar la vida del material antiadherente, podéis usar moldes individuales de papel dentro de la bandeja metálica (durará mucho más que si simplemente la engrasáis). Los moldes de silicona, tan de moda, no dan los resultados que a mi me gustan y hay que tener en cuenta antes de decidierse por ellos que deben ser de gama alta -y por lo tanto caros- o la mezcla de las magdalenas no subirá bien.

Trucos


Cualquier receta de magdalenas se puede hornear en un molde de bizcocho o pudding ajustando el tiempo de horneado.

Es muy importante que el horno esté bien caliente antes de introducir las magdalenas.

Si os gusta la textura de los muffins, no batáis las yemas y las claras de los huevos por separado, sino juntos con el azúcar, al estilo tradicional. El resultado es una magdalena sin copete, ideal para comer sola.

Recordad que estas magdalenas son ligeritas -llevan poco azúcar y grasa- así que no duran tanto como otras. A cambio, ¡tienen una textura realmente ligera!


¡Con el molde adecuado y añadiendo las claras sin prisas tenemos una magdalenas perfectas!


No olvidéis compartir conmigo en los comentarios vuestras experiencias al hacer esta receta y poner en común cualquier duda que os surja, siempre me gusta leeros.
¡Buen provecho!